Esta mañana a las 9 la misa de inicio de la jornada y el posterior traslado en furgoneta hacia la Hiniesta daban el pistoletazo de salida a una celebración descafeinada, una jornada romera sin romería, todo un acontecimiento truncado por segundo año consecutivo por la pandemia que asola el mundo aunque gracias a las vacunas parece ser que remite al menos en Europa, falta medio mundo pero al menos el 2022 se espera con la esperanza de que sea diferente y se pueda acompañar a la Virgen en romería
A partir de las 11:30 de la mañana la misa principal en la Hiniesta oficiada por el Obispo de Zamora y concelebrada con los sacerdotes de la zona y por supuesto con el párroco de la localidad.
135 fieles no más podrán disfrutar de una eucaristía bajo mínimos, que esperamos sea multitudinaria en años venideros entre tanto, la espera será de 365 días, en 2022.
