jueves. 28.03.2024
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Tras el éxito de participación en la concentración convocada el pasado día 4 de mayo de 2021, y, en palabras de Ignacio Crespo (UGT), Cristina Gobernado (CSIF) y Gonzalo Parra (CCOO), representantes de los tres sindicatos participantes, “al no haber tenido ninguna comunicación por parte del equipo de gobierno”, y teniendo en cuenta que “ni el responsable del área en la Diputación ni el presidente de la diputación nos han dado ningún tipo de respuesta ni se han puesto en contacto con nosotros para conocer en qué situación se encontraban sus trabajadores”, las organizaciones sindicales han optado por convocar una segunda concentración esta mañana en el Palacio de Pimentel puesto que “no hay voluntad por parte de la Administración de cambiar esta situación”.

Según han explicado desde UGT, CSIF y CCOO, su planteamiento “no pasa por valorar cifras. Venimos de un año en el que se ha llevado a cabo un esfuerzo importantísimo por parte de los auxiliares de enfermería en las residencias y parece que no hemos aprendido nada de todo lo que ha ocurrido. Hacen planificaciones a futuro de modelos asistenciales, pero se olvidan de la parte fundamental, que son los cuidadores. Su respuesta es bajar los mínimos asistenciales, pero, aunque los ratios se duplican, hay que tener en cuenta que se refieren a una legislación que no se ha modificado, en cuanto a los ratios, desde hace 30 años. Las necesidades de atención digna en la actualidad no tienen nada que ver con la normativa de antaño”.

Y es que la intención de los representantes sindicales pasa por hacer entender a quienes gestionan los centros residenciales de la Diputación de Valladolid que no sobra personal, como ellos afirman alegando la bajada de residentes, puesto que, aunque coyuntural y temporalmente hay menos residentes en la actualidad, los residentes están mucho más deteriorados y son más dependientes después de un año de encierro y de confinamiento sin apenas contacto con sus familiares. De hecho, los gestores de las Residencias han anunciado, paradójicamente, que se incorporarán 30 personas más una vez que se anulen las restricciones, lo que, según los sindicatos, “echa por tierra el motivo sobre el que basa su argumento la Diputación para reducir personal”.

En la misma línea, UGT, CSIF y CCOO denuncian que las autoridades “no han medido el impacto emocional de la Covid 19 en las personas mayores y tampoco entre los profesionales que les atienden, donde han aumentado en gran medida los riesgos laborales de este colectivo, donde empieza a pesar el cansancio acumulado y lo que se ha empezado a denominar síndrome del quemado”.

Además, este personal realiza funciones ajenas a su profesión puesto que, en los centros gestionados por la Junta de Castilla y León (con quien suelen establecer las comparaciones), cuentan con personal de servicios que realizan tareas que, actualmente, asume el personal Auxiliar de Enfermería en los centros de la Diputación.

Por todas estas circunstancias, el personal de atención directa se siente maltratado por los gestores de las Residencias de Ancianos. “En un momento en que todo empezaba a encauzarse y las condiciones de trabajo parecían normalizarse después de un año durísimo, en vez de hablar de la alta calidad asistencial de nuestros Centros, los responsables hablan de números y de que sobra personal” alegan los respectivos representantes y añaden que “esta bajada de mínimos de atención directa influye directamente en la buena calidad asistencial y supone tener menos tiempo para atender con dignidad y para prestar los cuidados necesarios (vestido, aseo, alimento, acompañamiento...), algo que no se merecen las personas que viven en nuestros Centros”.

Auxiliares de enfermería de la Diputación de Valladolid: “La asistencia con dignidad a...