El secretario del PP en Castilla y León, Luis Tudanca, prácticamente se cierra a una abstención para evitar que VOX entre en el Parlamento regional, aunque dejó entrever que los socialistas se plantearán esta medida solo si el PP lo pide y extiende el cordón sanitario a la extrema derecha a todo el territorio nacional.
Aunque Ferraz lo descarta, Tudanca no da un "no" rotundo a facilitar un gobierno solitario a Alfonso Fernández Mañueco, aunque la decisión, si llega, se sometería a la votación de los militantes.
La posibilidad de la abstención tras el batacazo en las elecciones autonómicas lo puso sobre la mesa el alcalde de Valladolid, Óscar Puente, aunque Ferraz se apresuró a decir que esa posibilidad no se plantea.
Pero, esta mañana, tras la reunión del partido, el líder de los socialistas subrayó que el "único culpable" de la situación es el PP y, por tanto, se negó a "regalarle" el gobierno de Castilla y León. "Regalarle un gobierno al PP después de 35 años en Castilla y León, nunca. Darle un gobierno a un partido que está en los tribunales por sus casos de corrupción, nunca", recalcó Tudanca.
Sin embargo, proclamó que el PSOE es "coherente" y que "lleva mucho tiempo haciendo frente a la extrema derecha".
Sobre su futuro al frente del partido en la comunidad, Luis Tudanca reconoció que por su cabeza pasó la idea de dimitir tras conocer los resultados electorales, pero finalmente no lo hará. "Sigo en pie", dijo, tras recibir el respaldo de todos sus compañeros.
